SugarMolly

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Todo sobre Molly en poquito texto jsjsjs

✨🌿LORE🌿✨

Hace cuatrocientos años, en lo profundo de un bosque ancestral, existía un pueblo oculto entre los árboles, protegido por una gema de drake de un poder inmensurable. En el corazón de la aldea se alzaba un antiguo templo de piedra tallada, cubierto de enredaderas y grabados antiguos que contaban la historia de la gema. Desde tiempos inmemoriales, su gente había jurado protegerla, pues se decía que su energía provenía de los mismísimos drakes que una vez surcaron la tierra.Molly, la hija del jefe del pueblo, había crecido con la historia de aquella piedra sagrada y conocía su responsabilidad de protegerla. Sin embargo, a diferencia de sus ancestros, nunca se tomó en serio su destino. Era una joven despreocupada, rebelde y aventurera, más interesada en explorar el bosque y divertirse que en seguir las rígidas enseñanzas de los ancianos. Consideraba que la gema era solo un símbolo del pasado y dudaba de las advertencias sobre su poder.Una noche, bajo la luz de una luna carmesí, un grupo de soldados llegó desde tierras lejanas. No buscaban comerciar ni dialogar: solo anhelaban el poder de la gema. Sus cuerpos estaban cubiertos con armaduras de metal brillante y en sus manos portaban extraños tubos de hierro que escupían fuego y muerte. Irrumpieron en el pueblo sin advertencia, disparando sin piedad. Los habitantes, armados solo con lanzas y arcos, no tuvieron oportunidad. La sangre empapó la tierra sagrada del bosque, y los gritos de dolor se ahogaron en el crepitar de las llamas que consumían las chozas.Molly, aterrorizada y furiosa, corrió al templo, sintiendo por primera vez el peso de su herencia. Aunque no entendía del todo cómo funcionaba la gema, decidió usarla sin pensar en las consecuencias. Al llegar, se arrodilló frente a la piedra, sintiendo su pulso vibrar en el aire. Sus manos temblaban al tocarla, y en ese instante, la gema reaccionó. Su luz la envolvió y, con un dolor abrasador, se incrustó en su pecho. Su cuerpo entero se convulsionó mientras el poder de la gema la transformaba: su cabello se tornó verde con mechas rosas, sus ojos resplandecieron con un ardiente color fuego, y su piel se cubrió de escamas moradas. Dos majestuosos cuernos emergieron de su cabeza, y una nueva energía rugió en su interior. Ahora, era algo más que humana. Era un ser de poder puro.Con un rugido que resonó por todo el bosque, Molly desató la furia de la gema contra los soldados. Llamas, vientos y temblores devastadores barrieron el campo de batalla, consumiendo todo a su paso. Sin control alguno sobre su poder, la destrucción se extendió más allá del combate. Las llamas devoraron no solo a los invasores, sino también al pueblo que juró proteger. En su desesperación, Molly intentó detener el caos, pero ya era demasiado tarde. Las casas ardieron hasta convertirse en cenizas, y el templo comenzó a derrumbarse.Cuando el fuego se disipó, Molly vio con horror lo que había hecho. Su pueblo yacía en ruinas, su gente destruida. Nada quedaba de la aldea que una vez amó. La culpa la golpeó con fuerza, y el peso del poder que había desatado la abrumó. Sus piernas flaquearon y, con un último suspiro, cayó en un profundo sueño, con la gema brillando débilmente en su pecho.Cuando despertó, el mundo que conocía había desaparecido. Cuatrocientos años habían pasado. El templo era solo ruinas cubiertas por la vegetación, y su aldea ya no existía. Árboles gigantes habían reclamado lo que antes fue su hogar, y el tiempo había borrado todo rastro de su gente. La humanidad había cambiado, pero no en la forma que ella hubiese deseado.Cazadores mataban por deporte. Leñadores devastaban el bosque sin medida. La misma ambición que había destruido su hogar seguía viva en los corazones de los hombres. Una ira profunda se apoderó de su ser. Su misión estaba clara.Desde entonces, Molly se convirtió en la guardiana del bosque. Con la gema fusionada a su ser, usaba su poder para proteger la fauna y la flora de aquellos que osaran dañarlas. Se convirtió en la sombra entre los árboles, el castigo de los que herían la naturaleza. Para los habitantes de la civilización moderna, era solo una leyenda: la sombra con ojos de fuego, que aparecía en la niebla para castigar a los destructores del bosque. Para la naturaleza, era su venganza y su salvación.Y así, en la soledad de los árboles, la guardiana continuaba su eterna vigilia, esperando el día en que la humanidad aprendiera a respetar el equilibrio de la vida.

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